La Cuarta Revolución Industrial, el Gran Reinicio y el Fin de la Vida Tal y Como la Conocemos

Cómo el capitalismo del siglo XXI llevará a todas las especies al borde de la extinción

 

Álvaro de Regil Castilla

Este trabajo es un extracto de "Mercadocracia y el Secuestro de la Gente y el Planeta", publicado en junio de 2021, el cual ofrece una valoración holística de la trayectoria insostenible que ha seguido la humanidad desde la Primera Revolución Industrial y el secuestro de la democracia por el capitalismo. El propósito de “Mercadocracia y El Secuestro de la Gente y el Planeta” es examinar la trayectoria que ha seguido el mundo desde que el neoliberalismo se impuso a la humanidad hace medio siglo.

La "Cuarta Revolución Industrial y el Gran Reinicio" contiene tres secciones. La primera abarca la trayectoria que la humanidad ha seguido entre la Primera Revolución Industrial y la Tercera Revolución Industrial, con la aparición del capitalismo y su creación de la gradual fractura metabólica con el medio ambiente que se aceleró enormemente durante la Tercera Revolución Industrial en el siglo XX.

La segunda sección prosigue con la Cuarta Revolución Industrial (4RI), pregonada para maximizar la eficiencia y la eficacia en la materialización con gran precisión de todos los resultados. Para lograrlo, ésta cambiaría radicalmente el modo de vida de la humanidad como resultado de una fusión de tecnologías que desvanece las fronteras entre las esferas física, digital y biológica. La 4RI es un fenómeno mercadocrático que tendrá enormes repercusiones en todos los ámbitos de la vida humana, en la vida de todos los seres vivos y en la capacidad de nuestro planeta para seguir siendo un planeta habitable. La 4RI tendrá un profundo impacto en nuestra vida pública y privada. También afectará a la vida de todos los seres vivos en diversos grados, con muchos de ellos ya al borde de la extinción, al encontrar que sus ecosistemas ya no son adecuados para su reproducción.

La última sección evalúa el llamado Gran Reinicio, pregonado como la solución a los problemas existenciales de la humanidad (causados por el paradigma mercadocrático). El Foro Económico Mundial (FEM) lo presenta -y las

metrópolis del sistema lo apoyan- lo como la forma en que las sociedades deberían abordar nuestros problemas existenciales de sostenibilidad. La pretensión es reiniciar completamente las estructuras de la sociedad hacia un nuevo paradigma capitalista anclado en la 4RI. El objetivo del Gran Reinicio, utilizando la pandemia de COVID-19 como carpe diem, es ofrecer ideas que ayuden a informar a todos aquellos que determinan el estado futuro de las relaciones globales, la dirección de las economías nacionales, las prioridades de las sociedades y la naturaleza de los modelos empresariales y la gestión de un patrimonio global. Aprovechando la visión y la vasta experiencia de los líderes involucrados en las comunidades del Foro, la iniciativa del Gran Reinicio tiene un conjunto de dimensiones para construir un nuevo contrato social que honre la dignidad de cada ser humano.9 Sin embargo, como expondré, se trata de una iniciativa absurda y cínica para acelerar la implementación de la 4RI estrictamente desde la perspectiva de la élite global de menos del 1% para maximizar su riqueza y poder.

Huelga decir que el Gran Reinicio resta importancia a los tremendos impactos negativos que tendrá sobre la vida de nuestro planeta, que ya se encuentra en una situación muy peligrosa en la que puede que ya hayamos cruzado un punto de inflexión que imposibilita la preservación de la vida tal y como la conocemos. En efecto, tres ámbitos significativos de la vida padecerán un impacto colosal con el avance de la 4RI a través del Gran Reinicio. Desde el punto de vista de la sociedad, los derechos humanos y laborales se están viendo profundamente afectados, con consecuencias nefastas. Sin embargo, en todas las esferas de la vida, la salud de nuestro hogar, el Planeta Tierra, al que pertenecemos como una especie más, se verá afectada hasta el punto de que es muy probable que cruce el umbral de no retorno, ya que la búsqueda incesante de crecimiento, acelerada por la 4RI, continúa sin cesar. Si esto ocurre, significaría que hemos llegado al final de nuestra existencia.

De ahí que esta sea mi contribución para plantear las preguntas y encontrar las respuestas a los acontecimientos clave que estamos presenciando mientras escribimos, con el fin de que la ciudadanía común adquiera conocimientos, tome conciencia y se faculte para tomar decisiones bien informadas que puedan contribuir a su vez a organizar y poner en

jaque la agenda que persigue la élite global del mucho menos del uno por ciento. Los acontecimientos actuales deben hacer que la salvación de nuestra especie y de nuestro planeta sea la cuestión fundamental y la piedra angular por excelencia de nuestro esfuerzo de transición hacia un nuevo paradigma sostenible. No puede ser una de las muchas cuestiones primordiales, sino el elemento único que impulsa nuestra visión para lograr la sostenibilidad, determinando fundamentalmente cómo elaboramos nuestra visión para nuestro nuevo paradigma. Está en nuestro propio interés ser conscientes de la catástrofe a la que nos enfrentamos, dejar de lado nuestra insensibilidad e individualismo y unirnos para cambiar la actual trayectoria fatal y virar hacia lo que Paul Burkett llama un punto de inflexión eco-revolucionario: las luchas defensivas multi-sectoriales de los movimientos ecológicos, comunitarios y urbanos uniéndose como un movimiento ecosocialista contra este sistema del capital financiero monopolista y sus funcionarios estatales,8 la pequeña élite que se cree dueña de nuestro planeta.


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